El nuevo recinto de "la Model" estará rodeado, por todo su alrededor, de un gran parque. Edificios y espacios verdes se vincularán entre ellos para conseguir una relación mutual de interdependencia. La huella de las edificaciones será la mínima imprescindible y maximizará su permeabilidad. El parque, por su parte, dará continuidad a la estructura panóptica enlazando, sin fronteras, la arquitectura, el patrimonio y el paisaje. Los beneficios de esta nueva relación se extenderán más allá del ámbito de actuación, mejorando las conectividades ecológicas, la cohesión social y la calidad de vida de la ciudadanía. El vínculo entre viviendas, equipamientos y parque permitirá una futura gestión cooperativa más eficiente ya que, a la diversidad del programa, el parque responde con un mosaico de posibilidades adaptables a las futuras necesidades. Ante una situación de emergencia planetaria en cuestiones fundamentales, como el clima o los derechos humanos, el conjunto de edificios y espacios verdes actúan juntos para responder a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ONU 2030) dando respuestas concretas y efectivas. Se opta pues para mantener y poner en valor el patrimonio existente, aprovechando al máximo este recurso con una vida útil todavía para agotar, evitando, en la medida de lo posible, el impacto ambiental de nuevas edificaciones. La mayor superficie verde liberada por esta estrategia, incrementará las posibilidades de ofrecer más y mejores servicios ecosistémicos para la población. La distribución del programa en los edificios patrimoniales se escoge también asociada a su mejor relación con el parque y en las posibilidades y ventajas que éste le ofrece. Se completa así un nuevo modelo del conjunto, un nuevo vínculo con la ciudad.